Una paciente francesa seduce a un médico negro dominante, lo que lleva a un encuentro caliente en el hospital. Los médicos perforan su mirada y una polla masiva encienden sus deseos, lo que resulta en una sesión salvaje y apasionada.
He estado deseando a un médico negro dominante, aquel que pudiera ayudarme con mi futuro profesional y satisfacer mis deseos carnales.Por fin lo encontré, y el encuentro se convirtió en un encuentro caliente.Sus ojos penetrantes y su presencia autoritaria eran irresistibles.Él tomó el control, sus fuertes manos explorando mi cuerpo, su aliento caliente contra mi oreja.Su gruesa y negra verga era un espectáculo para contemplar, un monstruo de una herramienta que me dejó jadeando por aire.Me tomó por detrás, su tamaño estirando mis límites, sus gemidos profundos y primarios llenando la habitación.Su acento francés añadió una capa extra de seducción, haciendo cada palabra, cada toque, más embriagante.Yo era su paciente, pero me sentía más dispuesta en su juego erótico.Su tamaño, su habilidad, su dominio - todo me dejó pidiendo más.
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