La salud mental de una joven paciente se deteriora durante su visita al terapeuta - Reese Robbins

La joven paciente, claramente luchando con su estado mental, llega a la oficina de los terapeutas.Es delgada y vulnerable, con los nervios a la vista al pasar por la puerta.El terapeutico, un hombre de mediana edad con bata blanca, la saluda con una amable sonrisa, guiándola a una silla.Comienza la entrevista, ahondando en sus más profundos temores y ansiedades.A medida que se va desarrollando la conversación, la línea entre paciente y terapeútico se desenfoca.El terapista profesional se desmorona, cediendo paso a un deseo primario.La lleva a sus brazos, explorando sus manos su cuerpo mientras desentraña su sostén.La habitación se llena con el suave crujido de tela y susurra acaloradas. El terapeuta, ahora desnudo, la lleva al sofá, donde toma el control, sus manos guiándole hacia ella.La habitación resuena con sus gemidos sin aliento, testimonio de su encuentro prohibido.La escena termina con el terapeútico retirándose, dejando su jadeo y él reacomodándose.La cámara captura cada detalle íntimo, sin dejar nada a la imaginación.